Cómo hacer la PRESENTACIÓN del BEBÉ

La presentación del bebé a nuestro perro es uno de los momentos que más suelen preocuparnos y es importante que se haga bien y con naturalidad. Os voy a enumerar una serie de consejos, pero debéis tener en cuenta cómo es vuestro perro, y si no lo veis claro,  acudir con anterioridad a un educador canino que analice la situación y os diga la mejor forma de presentar el bebé a vuestro perro.

Por un lado, hay que tener en cuenta dónde ha estado el perro mientras tu estás en el hospital. Es diferente que haya estado el perro solo en casa y solamente haya salido a la calle cuando tu pareja o algún amigo haya podido sacarlo, que si ha estado en casa de algún amigo o familiar. El nivel de estrés que puede tener en un caso y otro son diferentes y hay que tenerlo en cuenta. La manera de proceder va a ser un poco distinta siendo un caso u el otro.

Si ha estado solo en casa:

  • Lo ideal es que suba tu pareja a buscarlo, y os veáis en la calle (ojo si vas porteando al bebé, lo ideal sería que alguien llevase al bebé en ese momento – abuelos, amigo, carrito- por que con la euforia el perro va a saltarte y a comerte a besos).
  • Dar un pequeño paseo a la manzana aunque sea y que haga un poco de olfato(hierba, o con premios en el suelo), para así ayudar a tu perro a relajarse un poco antes dela presentación.
  • Antes de entrar en casa, podéis hacer una mini presentación en la calle. Si va en carrito, dejar que se asome y olfatee; si va con porteo, os agacháis un poco y que lo olfatee también. Nada, unos segundos, la presentación larga será en casa, es solamente para que vea que ya está ahí y que vamos a subir todos juntos a casa.

Si ha estado en casa de un amigo o familiar:

  • El mismo día que lleguéis a casa, o unos días después que ya estés mejor (es lo bueno de que lo tenga un familiar, te da unos días para recuperarte), que bajen andando al perro a tu casa, así ya habrá dado un paseo antes.
  • Que te vea a ti primero y a tu pareja, por que va a enloquecer después de varios días sin veros. Y pasar a dar un mini paseo juntos para que se relaje (y si puede hacer algo de olfato mejor). Lo mismo que en el caso anterior, tener en cuenta si lo llevas con carrito o porteando.
  • Hacer una mini presentación en la calle antes de subir a casa (igual que en el caso anterior)

La mini presentación en la calle puede parecer una tontería, pero es lo mismo que hago cuando viene un perro a casa. bajamos con Hiro, que se conozcan, que den un paseo juntos y subimos todos juntos. De este modo tanto Hiro como el perro nuevo se sienten más cómodos a la hora de entrar en casa, ya se han conocido antes y en casa no va a haber ya problema ni excitación innecesaria.

Una vez ya os ha saludado el perro y habéis hecho la mini presentación en la calle, es hora de subir a casa.

Cuando lleguéis a casa, lo ideal es actuar con normalidad, y con eso me refiero a que no es necesario decirle nada al perro de “mira quien ha venido””mira, es un nuevo hermanito tienes que ser bueno eh blablabla..”, con esa vocecita que solemos poner. Eso suele alterar/excitar al perro y no es necesario. ¿Y qué hago entonces? Pues normalidad, coges al bebé, y te vas al sofá o en una silla, te sientas, y el perro va a venir a ver qué tienes en brazos, por que son unos cotillas, por que es un olor nuevo y querrán investigar (o un olor no tan nuevo si has llevado alguna prenda ya antes, pero querrán saber quién es el que huele así).

Si chupa al bebé, es una buena señal (luego ya limpiáis  al bebé, pero intentar no apartar de forma brusca al perro en esta situación), si olfatea y se va, buena señal también. No hace falta que estéis media hora con la presentación, con unos minutos que lo huela está bien, ya habrá más ocasiones para que siga viendo quien es ese individuo tan pequeñito que ha entrado en casa.

Para hacer la presentación, siempre tenéis que tener en cuenta el carácter de vuestro perro. Y sigo insistiendo que si no lo veis claro, dejaros guiar por un profesional. Si tenéis un perro muy reactivo, bruto etc, este momento tendréis que trabajarlo antes con un profesional para que os ayude a gestionar este cambio en casa.

Además, todo lo que hayáis hecho durante el embarazo ayudará a que este momento sea más tranquilo y bonito para todos (en los posts de: CELOS, YA LLEGA EL BEBÉ y DURANTE EL EMBARAZO ).

Tener también en cuenta que no pasa nada si no hacéis todos los pasos, es decir, que cuanto más natural sea el momento, más fácil también para el perro. Pero sobretodo, no riñáis al perro. Si va muy bruto, lo llamas y lo acompañas; si está mucho rato chupando al bebé y no quieres, lo llamas tranquilamente y le das un kong o alguna cosita para que se entretenga y dejáis la presentación para otro momento. Pero sobretodo nada de chillar, “empujar” ni reñir al perro en ese momento. No queremos que asocie al bebé con algo negativo.

Os cuento un poco mi planteamiento con Hiro, y ya os contaré como lo he hecho al final,por que todo puede cambiar.

Hiro estará en casa de mis padres los días que yo esté en  el hospital, de modo que estará con familia que ya conoce. La idea no es verlo el mismo día que vuelva del hospital, sino un día después y así puedo descansar y coger fuerzas. Mi padre lo bajará andando, así ya da un primer paseo. Como la peque estará en su carrito, Hiro podrá saludarnos eufóricamente sin problema. Le daremos un mini paseo a Hiro mientras mi padre se queda con el carrito (por que  al ser invierno hace mucho frío y mientras paseamos se quedará en el portal). Cuando volvamos del mini paseo, dejaremos que Hiro olfatee y cotillee el carrito, y huela al bebé desde ahí y procederemos a subir a casa todos juntos.

Si veo que al llegar a casa aún está excitado por vernos, no sacaré al bebé aún hasta que se relaje un poco. Quizás hago algún juego de olfato antes de sacar al bebé del carrito.  Y finalmente, cuando Hiro esté tranquilo cogeré al bebé en brazos y me sentaré en el sofá. Si Hiro está durmiendo y no viene, no lo voy a llamar. Ya vendrá cuando él quiera, que la olfatee y listos. Ya os contaré cómo ha ido al final.